Paula de Sweet Ale siempre nos propone ideas geniales para ir de viaje y esta vez nos propone una forma distinta de conocer Milán!
Cuando viajamos en familia, normalmente adaptamos las necesidades y los intereses de los más pequeños de la casa, a los del resto del grupo. Pero en Sweet Ale creemos que hay que intentar encontrar un equilibrio entre todos y adaptarse unos a otros.
Hoy hacemos las maletas y nos vamos a Milán, un destino que a los mayores nos encanta, pero que en un primer momento no se ve muy orientado a los niños.
Visitar la famosísima Galleria Vittorio Emanuele, con sus tiendas y sus restaurantes, la Iglesia de Santa Maria delle Grazie, donde está “La última cena” de Leonardo da Vinci, una de las pinturas mas famosas del mundo, son algunas de las cosas imprescindibles qué ver en Milán; aparte por supuesto de la Catedral de Milán.
Pero hoy desde Sweet Ale vamos a aportar una visión distinta para visitar sitios que en un principio, sólo interesan a los padres. Hoy vamos a ver Milán desde el cielo!!
Estas fotos son de hace algunos años cuando visitamos Milán siendo los niños todavía pequeños. Veníamos de un viaje en coche por el norte de Italia, era verano y hacía bastante calor… los ingredientes perfectos tener “motín a bordo”, si les decimos a los niños que en vez de estar en la piscina del hotel, vamos a ver la Catedral de Milán…
Pero si le decimos que vamos a subir muy alto, vamos a subir a lo alto de la Catedral, y desde allí vamos a andar por los tejados… seguro que sus caras serán otras y la idea les divertirá mucho más.
Así es como visitamos el Duomo, una de las catedrales góticas más importantes del mundo, caminando por la terraza de la Catedral y viendo de cerca los pináculos y las esculturas.
El interior de la Catedral es de mármol oscuro y con columnas de mármol, que llegan hasta el techo con estatuas talladas. Como anécdota para contar a los niños, le podemos decir que en una bóveda del techo detrás del altar, se guarda uno de los clavos de la Cruz de Cristo, uno de los tesoros de la Catedral.
Para acceder a la terraza de la Catedral de Milán se puede subir por unas escaleras bastante cómodas o por un ascensor, pagando un suplemento.
La terraza de la Catedral ocupa casi toda la superficie del tejado y lo mejor de todo es que se puede pasear por las alturas, desde donde se contemplan unas vistas espectaculares de la ciudad. Ver las esculturas talladas de cerca es impresionante.
Horarios de visita:
Catedral: Todos los días de 7:00 a 19:00 horas.
Terraza panorámica: Desde noviembre hasta febrero: de 9:00 a 16:45 horas.
Desde abril hasta noviembre: de 9:00 a 21:45 horas.
Precios:
Catedral: 2€.Terraza panorámica:Ascensor: 12€.Escaleras: 7€.Baptisterio: 4€.Tesoro: 2€.
Terraza en ascensor + Baptisterio + Tesoro: 13€.
Esperamos que os haya gustado esta nueva perspectiva para ver Milán, ya que caminar por los tejados de la Catedral de Milán es una experiencia inolvidable, que los niños guardarán en su memoria.