Volar con niños puede no ser tan incómodo como piensas si vas preparada y sigues unas pautas básicas. Como todo en esta vida es cuestión de «prueba error». La primera vez descubres lo que te falta. La segunda todo es más fácil. Te contamos nuestros trucos: consejos volar con niños
1. ELEGIR ASIENTO, IMPORTANTE. El asiento en el que viajes puede marcar la diferencia entre un viaje bueno y uno «no bueno». Cuando compres los billetes, intenta reservar los asientos de avión que están en la parte delantera de la cabina de clase turista, en general inmediatamente detrás de los pasajeros de primera clase y business. El espacio con el que cuentan es mucho mayor que el del resto de asientos de forma que los niños tienen espacio para jugar, ir al baño o simplemente levantarse para dar un paseo por el avión.
Muchas veces las compañías aéreas no dejan reservar estos asientos hasta el día del vuelo. En tal caso, vuelve a llamar el día antes de viajar, ya que muchas veces se pueden reservar ese día. En caso de que no te dejen reservar esos asientos por teléfono o internet, intenta llegar al aeropuerto temprano para conseguir esos asientos. Las compañías aéreas suelen guardarlos para familias con niños. Algunas compañías low cost cobran un suplemento por viajar en esta fila. Si vas con niños, merece la pena pagar la diferencia.
2. SILLA DE VIAJE, EN EL ASIENTO. Si viajas con un bebé, puedes llevar la silla de coche del grupo O. Si hay asientos disponibles pueden colocarla al lado bien atada con el cinturón de seguridad y tu bebé viajará cómodamente en su propia silla. Como tú no has pagado billete por el bebé, esta opción depende de las plazas y sobre todo de la buena voluntad de la tripulación.
3. CUNAS DURANTE EL VUELO. Si el viaje es largo, las compañías ofrecen cunas para los bebés. A veces hay que pagar un suplemento por ellas, sin duda compensa.
4. LLEVA DE TODO PERO SIN PASARTE. A menudo nos pasamos. Creemos que lo mejor es llevar de todo encima por si acaso. Sin embargo, excederse no es una buena idea, porque demasiado equipaje nos dificultará la movilidad y con un niño eso es fundamental. Por supuesto hay que llevar equipaje de mano con todo lo necesario pero evitar lo que no sea imprescindible.
5. LLEVAR COMIDA. Llevar comida es importante por dos razones: la primera es que comer es una actividad que lo va a entretener durante un rato. Y la segunda es que los niños a veces no conciben esperar a que toque la comida del avión y pueden tener una rabieta si tienen hambre. Los horarios en que las sirven pueden no ser el horario en que come tu niño habitualmente, o puede suceder que no les guste la comida de avión, lo cual es más que probable. También es bueno llevar vasos anti-vuelco, para evitar derrames.
6. DESCUENTOS FAMILIAS NUMEROSAS. Si eres familia numerosa no olvides soliciar el descuento que suelen hacer las compañías a la hora de comprar el billete.
7. REDUCIR EFECTO OÍDO EN LOS NIÑOS. Si tu hijo tiene una infección en los oídos, deberás discutir el tema del viaje con el pediatra. Este tipo de infección suele ser muy dolorosa para los que viajan en avión.
Masticar chicle, un caramelo o bostezar son métodos sencillos para reducir el efecto en los oídos. Si tu hijo está durmiendo, deberías despertarlo antes de comenzar el descenso. El aterrizaje es, a menudo, más perjudicial para los oídos si estás durmiendo dado que las personas tragan menos.
8. TARJETAS DE VIAJERO FRECUENTE. Sí. La mayoría de los programas aceptan niños al igual que adultos. Inscribir a tu hijo en uno de estos programas le hará ganar puntos por cada ticket pagado. A menudo, esto no tiene coste de inscripción.
Y tú, ¿tienes algún truco para que un viaje en avión con los niños sea más cómodo?
Nuestro hijo de dos años ha viajado mucho, hemos perdido la cuenta pero seguro que lleva más de 100 vuelos.
A nosotros nos funcionan muy bien llevar el ipad con películas que le gustan y sobre todo con fotos y vídeos suyos. La primera hora y media está asegurada.
También nos funciona darle de comer y beber cosas que le gusten durante el despegue y el aterrizaje: zumos, batidos, galletas,… Cuando son tan pequeños no comprenden lo de bostezar y por supuesto no pueden masticar un chicle.
Cuando son bebés darle el pecho o el biberón es la mejor solución.
Ah, y cansarles antes de subir al avión: carreras por los pasillos, los parques de los aeropuertos o contar aviones funciona perfecto para que vayan dormidos al menos la primera hora.
Gracias por tus consejos de mama viajera experta! Lo del Ipad es infalible y tenerles un rato corriendo antes de subir también… Besos