Disfruta el momento: mindfulness

Este post hay que leerlo con la música muy alta. Una canción que te guste, que te contagie alegría. Venga ponla. Porque es viernes y se trata de algo tan simple y tan difícil:… disfrutar el momento. Sin pensar en el pasado ni agobiarse por el futuro. Solo eso. Disfrutar cada segundo, cada sensación, cada juego, cada sonrisa…

Lo pienso a menudo: Nuestra mente no descansa: siempre está pensando en lo que viene, en lo que tenemos que hacer… en las mil tareas pendientes, en los anclajes pasados que nos hacen agobiarnos por el futuro…

Me encanta observar a los niños y ver que en ellos el mindfulness es innato. Cuando juegan, juegan. Cuando cogen arena con una pala, cogen arena con una pala. Toda su atención está ahí: en la pala, en llenar el cubo, en lo que se les cae…

No están pensando en los deberes de mañana, ni en su amiga Olivia que se enfadó con ella esta mañana. La pala, la arena, el cubo y ya. Y tan felices.

Y hoy, vuestra tarea de viernes es esa: subir la música, colgaros la sonrisa y prometerme que tendreis un ratito Minfulness. De disfrutar del tiempo con tus hijos centrándote solo en eso. Serás capaz?

Le llaman técnicas de atención consciente y es una disciplina que influye positivamente en muchas habilidades sociales y emocionales.

Tenemos tanto stress y preocupaciones… y sin embargo a veces no se deben a situaciones reales. No es que tengamos un león a punto de comernos ni una pared que se nos cae físicamente encima, verdad? Casi siempre nos generan estrés cosas imaginarias que tenemos interiorizadas.

Así que hoy, disfruta de los pequeños momentos y céntrate en ellos. Nada de ayer ni de mañana. Hoy disfruta del hoy. De los pequeños momentos con los niños: como hacer manzanas asadas y que toda la cocina huela a canela y manzana, rebañar juntos el final del bote de Nutella o enseñarles a andar en bici y dar el primer paseo juntos.

Si a los niños les sirve un simple barquito de papel para ser feliz, por qué no aprender de ellos un poco?

Feliz fin de semana!