Antonio Gala dijo una vez que la felicidad es darse cuenta de que nada es demasiado importante. Yo iría un poco más lejos… y le daría una vuelta. La felicidad es darse cuenta de que todo en la vida, lo pequeño, lo rutinario, lo casual… es importante. ¿Cuándo fue la última vez que te hiciste algo con pasión? El otro día vi un anuncio de televisión y me encantó el mensaje. Le preguntan a una conocida actriz… ¿Cómo te da tiempo a hacerlo todo? Y ella contesta: porque no pongo excusas.
Ay, las excusas… los peros, los miedos… siempre mañana, siempre después. Nuestras limitaciones… Las que nos frenan y no nos dejan disfrutar, apasionarnos.
Las excusas son fáciles, y siempre están a mano: no tengo tiempo, no tengo suerte, las cosas me van mal… ya lo haré.
¿Te has preguntado alguna vez por qué hay personas que tienen tiempo para todo y otros que nunca llegan a nada? La vida es actitud, ya lo dijimos el otro día.
La felicidad es…
Un amanecer. Un olor. Un recuerdo.
Una taza de chocolate caliente con olor a canela.
Un abrazo inesperado de tus hijos cuando estás triste. A ellos por mucho que disimules no puedes engañarles…
Reirte a carcajadas de una tontería.
La felicidad es pisar hojas secas en otoño. Parar el coche, bajarse en un parque bonito y jugar a tirar hojas con los niños. A dónde ibas?? No importa. Ya llegarás.
La felicidad es absorber lo bueno. Es ver dormir a tus hijos y sentir que tú eres su lugar en el mundo.
Escribe una lista de cosas que te harían feliz y… hazlas! Pero no pidas imposibles… yo también quiero ir a Laponia, pero este año me conformo con ver las luces de Navidad con los niños. Algo que hace tiempo no hubiera apreciado, hoy… son mi para mi sinónimo de felicidad.
No esperes grandes momentos. Aprende a disfrutar de los pequeños.
La felicidad es una sensación no un momento.
Date un capricho, come pizza sin remordimiento, salta en un charco, canta sin música.
He leido en un blog que me fascina que «Todo lo que nos ha sucedido durante nuestra vida, especialmente en la infancia nos marca, nos condiciona. Filtramos la vida a través de esas experiencias. Como si llevásemos unas gafas con distintos filtros a través de las que vemos la vida»
Y yo quiero que mis hijos tengan filtros de colores, la vida ya se encargará de los tonos grises.
Piensa bien en las cosas que dices, en la energía que contagias, en no culpar siempre al otro.
Piensa que los pequeños que están a tu lado serán un poco como tú seas ahora.
Yo elijo ser feliz. Y tú?
Cuanta razón! Eso de que la vida es actitud totalmente. Y yo elijo ser positiva, reír mucho, aprovechar cada oportunidad de viajar y pasar el mayor tiempo posible con los niños. No quiero un dia mirar atrás y pensar que no he sido capaz de ser feliz con lo que tenia.
La felicidad también es parte de la actitud que tomas ante las cosas. Hay que ser felices, claro que sí!!! siempre hay algo, mas cerca de lo que nos creemos, que nos puede ayudar a encontrar esa felicidad. Gracias por el post, precioso!!
Qué bonito post!!!! Yo también elijo ser FELIZZZZZZZ