Viajar a otro país a vivir la experiencia de un campamento de verano es uno de los mejores regalos que le podemos hacer a nuestros hijos. Estudiar inglés en el extranjero más que un gasto, es una inversión de futuro! Los niños aprenden a pensar y vivir en otro idioma, se divierten y sobre todo fomentan su autonomía y capacidad de relacionarse y hacer nuevos amigos.
No nos engañemos: hoy en día hay que saber idiomas. Para asegurarles a tus hijos un futuro con más oportunidades, aprender inglés es imprescindible.
La ventaja de estudiar inglés en el extranjero es que la inmersión es total. La mente tiene que acostumbrarse a pensar en ese idioma! El éxito radica en que se alterna con otro tipo de actividades como deportes o actividades más lúdicas de forma que el niño aprende casi sin darse cuenta… porque en realidad no estudia inglés, vive en inglés!
Sabemos que en estas fechas sois muchos los que buscáis campamentos de verano en campamentos de verano en MamasViajeras y queremos ayudaros.
La posibilidad de vivir experiencias nuevas, desconectar de su vida cotidiana, conocer otros países, otras costumbres, divertirse practicando actividades y sobre todo aprender a desenvolverse en otro idioma… todo son ventajas. Un desafío que sin duda los pequeños disfrutarán mucho y que tendrá innumerables ventajas en su educación y en su carácter.
Lo complicado muchas veces es elegir país y campamento. A nosotros nos gustan especialmente los campamentos de verano de EF Education First porque es uno de los veteranos y por la gran variedad de posibilidades que ofrece en cuanto a idiomas, destinos y duración.
Ofrecen un ambiente relajado y lúdico. A sus campamentos de verano van estudiantes procedentes de todo el mundo: son una auténtica mezcla de culturas. Y su dilatada experiencia es una garantía de éxito. Y si hay un idioma por excelencia elegido por todos los padres, ese es el inglés. Los campamentos de inglés de EF ofrecen estancias tanto con una familia anfitriona como en residencia de estudiantes, donde los estudiantes estarán practicando inglés prácticamente durante todo el día.
Además, los niños con menos experiencia también pueden optar por asistir a un campamento de verano con un grupo de su propio país, para tener la posibilidad de usar su propia lengua cuando lo necesiten. Muchas y distintas opciones para adaptarse a las necesidades de cada familia y cada niño.
Para más ideas de campamentos en sitios web como buscocampamentos.com ofrecen un recopilatorio de ideas y consejos de otras compañías para que puedas elegir a dónde enviar a los pequeños (y no tan pequeños) de la casa.
Porque aprender y estudiar inglés en el extranjero no es sinónimo de aburrirse, ¿no crees? Practicar deportes, hacer excursiones culturales y vivirlo todo en otro país… sin duda un verano que tus hijos no olvidarán.
A mi me encantaría hacer un curso de inglés en el extranjero en familia, he oído a alguna familia que lo ha hecho y debe ser una experiencia alucinante, por la mañana unas horas de clases, cada uno en su nivel (para niños suelen ser juegos y actividades programadas) y por la tarde a hacer turismo y conocer la cultura del país! Dan la posibilidad de vivir con familias o en apartamentos, en fin, que cuando mis peques sean un poco más mayores me lo plantearé!