Cascais con niños, escapada a Portugal en familia

Como todos sabéis nuestra Mamá más Viajera, desde hace unos meses, está en reposo; y aunque cada vez falta menos para que nazca su bebé, para una persona tan activa como Johanna, estar tanto tiempo en casa no debe ser fácil. Así que desde Sweet Ale, vamos a distraerla un poco haciendo un viajecito muy especial: Cascais con niños. Para los que nos gusta viajar, desde el momento en el que empezamos a planear un viaje, ya lo estamos disfrutando, y aunque no lo hagamos a corto plazo, para cuando podamos ir, ya lo tenemos bastante preparado.

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Vamos a recomendaros un sitio precioso que desde mediados del siglo XIX, fue el elegido por la nobleza europea como lugar de veraneo; de hecho gran parte de la costa está salpicada de Palacetes, con vistas al Océano Atlántico que, antiguamente, eran residencias de verano. Os estamos hablando de Cascáis. Un emplazamiento al borde del mar, playas y un casco antiguo lleno de tiendas de artesanía y terrazas. Este es un destino perfecto para hacer una escapadita en familia. Tiene un tamaño perfecto para poder dejar el coche aparcado durante unos días y disfrutar de paseos preciosos.

Estas son las 10 cosas que no debes perderte en tu próximo viaje a Cascáis:

Parque Marechal Carmona: Este espacio verde situado en el centro de Cascáis eran los Jardines del Palacio de los Condes de Castro Guimaraês. Es una amplia zona ajardinada, con invernadero, columpios, una cafetería con terraza, un mini zoo y hasta una biblioteca infantil.

Cabo da Roca: Por la carretera de la costa hay un espectacular acantilado que se alza a 140 metros sobre el nivel del mar. Es aquí donde nos encontramos con el punto más occidental del continente europeo, y un monumento en forma de cruz así nos lo indica. Como dijo el poeta portugués Luis de Camôes, es aquí “onde a terra se acaba e o mar começa”. Un paisaje realmente espectacular, si vais hacia la tarde podréis contemplar una de las más bonitas puestas de sol.

Casa da Guía: Un precioso Palacete del siglo XVII restaurado y convertido en un espacio donde encontrar galerías de arte, tiendas de decoración, joyerías y varios restaurantes, cafés y terrazas. Un increíble lugar al borde del océano Atlántico, donde disfrutar de un café por la mañana y cenar al aire libre en las noches de verano, donde se celebran conciertos al aire libre.

Boca do Inferno: Siguiendo la carretera de la costa no os podéis perder una visita a la Boca do Inferno, una especie de túnel natural de aproximadamente 20 metros de profundidad, donde es un espectáculo ver como entra el mar y las olas rompen contra las rocas. Su nombre se debe a que esta formación rocosa parece una boca de la que sale un tremendo sonido, que es el que hacen las olas al romper. Está a 20 minutos más o menos caminando desde Cascáis. Hay un paseo muy bonito de unos diez minutos aproximadamente, siguiendo la carretera desde la Casa da Guía hasta la Boca do Inferno.

Frango piri –piri: Un plato típico que consiste en pollo asado al carbón con patatas fritas y ensalada, así de simple; por eso es una opción perfecta para ir a comer con los niños. Os recomiendo el Jardim dos Frangos, es un clásico en Cascáis, un sitio familiar y sin pretensiones, pero donde comer muy bien y a buen precio. Mejor en la terraza, aunque sea en invierno, porque está muy protegida, y si vaís con varios niños es mucho más cómodo y amplio que dentro. Muy céntrico, en la Alameda dos Combatentes da Grande Guerra, 68 (2750 – 427 Cascáis).

Santini: Nadie se puede ir de Cascáis sin probar los helados de Santini, os parecerá estar en la mejor heladería de Italia. Desde que en 1949 Attilio Santinio abrió este negocio, su fama ha traspasado fronteras; y es que la calidad de la materia prima es el secreto de su éxito. De entre toda la variedad de sabores, los mejores son los helados de fruta!! Los encontraréis en la Avenida Valbom 28F.

Casa da Pérgola: Esta mansión de finales del siglo XIX, con una preciosa fachada de azulejos pintados a mano, está en la Avenida Valbom, 13, en medio de un bonito jardín y justo enfrente de la heladería “Santini”. Es propiedad de la misma familia desde hace varias generaciones y actualmente es una Guest House B&B.

Cidadela de Cascáis: Este complejo fortificado estaba destinado a proteger los accesos a la ciudad de Lisboa, su origen se remonta a la Edad Media. Actualmente en el interior de la Ciudadela hay tiendas, restaurantes y una Pousada.

Marina de Cascáis: Puerto de recreo que está situado en el centro de la villa de Cascáis. Fue el escenario de importantes eventos internacionales de Vela. Un lugar donde pasear, con una amplia variedad de tiendas, restaurantes y terrazas.

Parque Nacional de Sintra: Un poco más alejado de Cascáis, pero únicamente a unos once km aproximadamente, se encuentra este Parque declarado Patrimonio Mundial por la Unesco, de 15.000 hectáreas de bosques frondosos y donde os habíamos hablado en este POST 

Si os apetece acercaros a visitar este entorno, lo ideal es hacer esta excursión por la mañana y comer en el Restaurante “Tacho Real”, muy buena cocina y unos postres, como en la mayoría de los restaurantes portugueses que son la locura.