Ahora sí: nos vamos. Unos días de desconexión total y absoluta. Lejos de todo, los 5. Dedicándonos a no hacer nada, o mejor aún, a hacerlo todo porque con 3 niños lo de no hacer nada es una utopía que no se cree ninguna madre de familia numerosa. Si, vale, me voy a no parar, pero de hacer cosas que nos gusten y hacerlo todo con una sonrisa. Porque viajar con los niños es agotador, pero a mi ese «no parar» me pone las pilas y me hace relajarme mas que ninguna otra cosa del mundo. «Hola me llamo Johanna y soy adicta a viajar» je,je… lo confieso.
Nuestro primer destino un par de semanas a Cantabria y después la esperada escapada a Portugal: Cascais, Sintra, Lisboa, Comporta…
Y estas vacaciones, deseadas y esperadas, que serán mucho más tranquilas que las de otros años… serán unas vacaciones, básicamente, felices. Y esa palabra quiero tenerla muy presente. Y como quiero hacer muchas cosas y tengo 3 hijos que me roban mucho, muchisímo tiempo (he dicho muchísimo, quería decir todo)… he hecho una lista de las cosas que voy a hacer estas vacaciones sí o sí.
Porque así, llevándolas apuntadas no se me olvidan y me obligo a poner el tic de «hecho» en todas ellas. Para mi cada una de ellas son pequeñas capsulas de felicidad.
1. Desayunar un día a solas viendo amanecer. En esto tengo ventaja porque la bebé se despierta muy temprano y normalmente los demás a esa hora duermen. Para mi empezar el día a solas, con un rico desayuno, viendo como sale el sol es un lujo. Me carga de energía. Me hace desear que amanezcan los demás para hacer cosas y disfrutar. Mi rato a solas, lo quiero por las mañanas.
2. Comer muchos helados con los niños. Que sería del verano sin helados? Nos encanta y compartirlos con ellos y pelearnos por esa última cucharada nos divierte mucho. Saben que mama es muy golosa y ellos también así que cada uno su cuchara y «salvese quien pueda».
3. Jugar con los niños a juegos de mi niñez. Me divierte muchísimo volver a ser niña con ellos. Jugar a las cartas a los juegos de toda la vida, como, Burro, o correr y parar en el Escondite Inglés, coger conchas en la playa… Me trae tantos recuerdos…
4. Dormir siestas todos juntos. Es lo bueno del verano y de no tener horarios. Que algún día que estamos cansados comemos en casa después de pasar la mañana en la playa y nos metemos todos juntos en la cama. A no hacer nada. A achucharnos y pasar calor pero a dormir tan a gusto.
5. Saltarme las reglas y no bañar algún día a los niños ni darles de cenar a la hora de siempre. Durante el resto del año soy muy cuadriculada pero en vacaciones me encanta saltarme las normas e improvisar. Que estamos en la playa y se hace tarde… pues a meterse en la ducha de la playa y eso vale por hoy. O sentarnos en una terraza a comer todos junto una pizza porque el sitio nos mola y no queremos irnos tan pronto. Horarios? Eso para septiembre…
6. Coleccionar atardeceres. Soy coleccionista de atardeceres, nunca os lo había contado? Pues en Instagram voy publicando muchos. Me gusta elegir el sitio donde vamos a ver caer el sol. Es otro de mis grandes momentos del día en vacaciones… si es en la playa o al menos en la naturaleza, mejor.
7. Cenar al aire libre. Para eso es el verano no? Para terminar el día cenando mientras ves la luna. Vayamos donde vayamos siempre hay varios días que hacemos una barbacoa y cenamos todos contando historias bajo el cielo. Tengo grabados muchos momentos de esos en nuestro viaje al Loira o Croacia.
Y sobre todo, dar muchos abrazos y besos. Esto no me hace apuntarlo en la lista porque os puedo asegurar que no se me olvida.
Me voy unas semanitas! En nada estamos otra vez juntos! Hasta septiembre!
Seguiremos publicando cositas de lo que vamos viviendo en vacaciones en redes sociales, todavía no nos sigues en Instagram? Pues este verano es el momento! Besos a todos!
Tus planes suenan increíbles! Que los difrutes 😉 y que estas más que merecidas vacaciones sean estupendas!
Pues lo dicho a disfrutar mucho y mucho. Un besiño enorme