Cuba es un país que atrapa, que no deja indiferente a nadie. El país de la música es un viaje en el tiempo. Y poder conocerlo en familia me parece una opción maravillosa porque este destino es una lección de historia. La carga emocional del viaje hace que los aprendizajes se fundan con las visitas. Cuba se ve con los ojos pero se vive con el corazón.
Todo recorrido en el país empieza por su capital. Imposible saltársela. La Habana es una ciudad que hay que visitar al menos una vez en la vida. Y cuando vas, seguramente decidas que esa primera vez no será la única. La Habana no se supera. Una capital vibrante y llena de ambiente, de música, pero también decadente y necesitada. Una ciudad de contrastes. Que te agarra el alma y te la estruja. No es una ciudad fácil. Bonita como ella sola. Pero derruida y sin recursos. Caminar por La Habana es sorprenderse en cada esquina viendo la riqueza que había en la ciudad y preguntándote: ¿cómo es posible que estén dejando morir tanta belleza?
La situación del país resulta demasiado obvia en La Habana. Su aura te embruja. Te recomiendo perderte por sus calles, hablar con su gente (siempre sonriendo) y disfrutar de sus decadentes fachadas y sus coloridos coches antiguos. Si Cuba es especial, La Habana es la joya de la corona.
La zona más turística de La Habana es el barrio conocido como Habana Vieja. En él se concentran la mayoría de monumentos y sitios que ver en La Habana. Además de esta zona la ciudad está dividida en otras dos zonas: la Habana Central y Vedado. En función de los días que tengas te recomiendo visitar una zona o varias.
Por supuesto debéis empezar haciendo un recorrido guiado por La Habana Vieja. Allí tienes mucho que ver y disfrutar porque el alma de lo que fue y de lo que es la ciudad reside en gran parte en esta zona. Para moverte por Havana lo mejor es ir a pie. Nosotros tuvimos una visita guiada con EnjoytravelGruop la agencia que nos organizó el viaje y nos encantó.
Te dejo 10 planes que no debes perderte si visitas la ciudad con los niños.
-Visita el Capitolio de la Habana. Una réplica del Capitolio de Washington, pero el de La Habana es un poquito más grande que el de EEUU. Lo hicieron queriendo.
– Otro imprescindible es visitar su catedral. Además, la entrada es gratuita y es muy curioso ver la diferencia de simetría de sus torres. Ahí estuvo enterrado Cristóbal Colón antes de que sus restos fuesen trasladados a la Catedral de Sevilla.
-Sin duda uno de los planes estrella con niños es subirse en un coche de época para dar una vuelta por la ciudad en una descapotable. Mis hijos fliparon.
–Deambular y dejarte llevar sin plano por las coloridas calles del centro y otras más alejadas y descubrir rincones con un encanto indescriptible.
-Ver el atardecer desde El Malecón es uno de los momentos más mágicos del día. Los pescadores habaneros de fondo y la estampa de los niños saltando desde las rocas al mar…
-Otra de las plazas con más vida de La Habana es la conocida como Plaza Vieja, donde hay muchísimos cafés y restaurantes.
-La plaza más grande de la ciudad recoge el Monumento a José Martí y una de las estampas más conocidas de la capital de Cuba: el Ministerio del Interior con la imagen del Ché Guevara y la bandera cubana. Es quizá la zona más fotografiada de la ciudad
– Cañonazo de las nueve: cada noche a las 21:00 horas se rememora el toque de queda en la zona del Castillo del Morro mediante la ceremonia de «el cañonazo». A los niños les encanta este momento así que si os encaja sí os recomiendo acercaros a verlo. Para llegar hay que cruzar la bahía, y se puede hacer o bien en taxi, o la lanchita de regla, un baratísimo medio de transporte que funciona entre los dos extremos. Conviene llegar temprano para coger sitio porque se llena, además mientras esperas puedes ver las tiendecitas de la zona y los uniformes de los soldados.
-Visitas obligadas: La Bodeguita del Medio y su mojito y La Floridita y su daiquirí. Obviamente tus hijos no van a probarlos pero son lugares icónicos de la ciudad que merece la pena ver y visitar. El ambiente, la música y todo lo que rodea a ambos baros hacen que merezca la pena visitarlos.
-Hotel Nacional: Uno de los símbolos de la grandeza cubana es sin duda otra visita que no hay que perderse. Es uno de los hoteles más lujosos y emblemáticos del país.
UNA SORPRESA DE LA CIUDAD: UN OASIS VERDE.
Dejando atrás el barrio del Vedado, encontramos una de las sorpresas menos conocidas de la ciudad por el turista: El Bosque de La Habana. Esta zona es vida, un pulmón verde con tupidas plantas trepadoras y exhuberante vegetación tropical. Al parque llegamos en nuestro coche descapotable y la experiencia de visitarlo fue muy positiva.
Una vez dentro, el bullicio de la ciudad parece inexistente. El bosque forma parte del Gran Parque Metropolitano de la Habana. Sus 700 hectáreas de extensión son como un remanso de paz y a nosotros nos sorprendió mucho conocerla. Alli vimos el árbol más antiguo de Cuba.
La idea del parque se remonta a 1912 durante las labores de urbanización que, para La Habana, había diseñado el arquitecto y paisajista francés Jean Claude Nicolas Forestier.
NO PODRÁS RESERVAR HOTELES EN BOOKING.
Muy importante también es saber que debido al bloqueo económico no podrás reservar por tu cuenta hoteles en cuentas como booking o airbnb. Lo mejor es evitar problemas y viajar con una agencia.
Nosotros contratamos nuestro viaje con ENJOYTRAVELGROUP una agencia especializada en el destino que conoce el país y todas sus opciones y hace viajes a medida muy bien de precio. Tienen 20 años de experiencia y son la mayor agencia receptiva de Cuba.
DÓNDE ALOJARSE. Nosotros nos alojamos en el HOTEL IBEROSTAR PARQUE CENTRAL y fue todo un acierto. Su ubicación es muy céntrica y es todo un privilegio estar en el Parque Central donde normalmente aparcan muchos de los coches de época esperando a los turistas.
El hotel tiene un buffet que ha ganado premios como el mejor de Cuba y es posiblemente el sitio en el que mejor hemos comido durante el viaje. Además su punto fuerte es la maravillosa terraza con piscina y jacuzzi que tiene en la última planta. Volver de las excursiones y poder bañarnos en esa piscina era un plan que hacía felices a los pequeños.
DÓNDE COMER. Me gustó especialmente el restaurante Mojito Mojito de La Habana. Los gambones al ajillo y la ropa vieja de este local están deliciosos y también sus mojitos. Los hacen también sin alcohol para los niños.
INFORMACIÓN IMPORTANTE PARA VIAJAR A CUBA:
Estos son los requisitos obligatorios para viajar el país:
– Pasaporte con validez 6 meses
– Visado
– Registro en la plataforma DViajeros. Se pueden rellenar 48 horas antes de viajar y es obligatorio tenerlos para acceder al país. Te dan un código QR que te escanean al llegar.