Mis propósitos de madre para el 2015

Sé que este post llega tarde. Que todo el mundo lo hizo el 31 de diciembre. Casi todos los años me planto delante del fin de año con muchísima ilusión y una lista interminable de propósitos para el año nuevo. Esta navidad por primera vez no lo he hecho. No tenía fuerzas ni ganas, ni proyectos preciosos con los que ilusionarme… Asi que decidí que mis nuevos propósitos ya llegarían cuando el corazón lo decidiera, no cuando el calendario lo diga. Hoy la vuelta a la rutina y echar mucho de menos a los niños que ya están en el cole y no inundan mi casa de alegría ha sido determinante para sentarme a escribir y hacerme promesas.

1. REIRME, MUCHO. Quiero que mis hijos se rían todos los días. Qué cosa más simple verdad. No tanto. No hablo de que se rían en el cole con sus amigos, hablo de sentir que son felices en casa, de esforzarme en provocar yo esa risa haciendo cosas juntos a diario. Cocinar juntos (mi hija está enganchada a Masterchef Junior y el mundo cocina les fascina), contar cuentos, hacer dibujos… disfrutar de esas tardes tontas de invierno metidos en casa haciendo todo y nada.

2. REGALAR RECUERDOS. Estas navidades lo pensaba… qué poco me queda para que mi hija deje de creer en los Reyes… qué pena me da lo rápido que pasa todo… Soy de las que adoran hacer fotos y guardar recuerdos de todo. Y ver los albumes con los niños les ayuda a recordar ciudades y momentos, alegrías y experiencias especiales vividas juntos. Seguramente habrían olvidado el viaje a Disney si yo no llego a hacer el album pero está ahí en el salón y lo cogemos de vez en cuando y nos reímos recordando anécdotas. Este año me he prometido hacer un album distinto, no de grandes viajes sino del día a día, de todas esas fotos de payasadas y trastadas diarias que forman nuestro día a día. Regalar recuerdos para que tus hijos los tengan cuando sean mayores, hay algo más especial?

3. QUIERO QUE MIS HIJOS APRENDEN A PERDER. Esta también es una idea que me da vueltas desde hace tiempo. Educamos a nuestros hijos para el éxito. Y por supuesto yo quiero que mis hijos lleguen lejos. Que luchen, que triunfen, que intenten ser los mejores. Pero la vida está llena de frustaciones, de momentos difíciles y muchas veces nuestros hijos no saben cómo reaccionar ante un fracaso. No les enseñamos a perder. Y no pasa nada. Hoy pierdes, pero te levantas y sigues… porque esta es la única forma de que mañana ganes. Eso es lo que quiero que tengan claro. Que perder forma parte del éxito. Que no pasa nada. Que no hay que frustarse ni sentirse fracasado. A veces les veo que sufren cuando algo no les sale… lloran, lo pasan mal cuando no son capaces de hacer algo…

Mi propósito este año es trabajar eso. La vida está llena de piedras, claro que sí, pero cógelas y haz un castillo!

4. QUIERO CUIDARME MÁS.  Me he centrado tanto tanto en ser madre que a veces tengo la impresión de que se me olvida cuidarme. Siempre ellos primero, siempre su ropa, sus cosas, sus caprichos… me hace tan feliz hacerles felices que de pronto una piensa: oye! También me hacía feliz hacerme feliz a mi! Nadie mejor que yo sabe hacer eso! Así que este año me he prometido darme caprichos también yo. Que me los merezco y punto.

Y quiero, por encima de todo ser una familia feliz. Lo pido todo no es cierto?