Este es sin duda uno de esos parques para ir con niños mágicos en Madrid. Y hoy lo disfrutamos a través de las fotos de Jessica Davey Photo. El Capricho es sin duda uno de los parques más bonitos, especiales y románticos de Madrid. Al visitarlo descubriréis un lugar lleno de historia ideado por los Duques de Osuna en 1787, convertido en Cuartel General durante la Guerra Civil y hoy en día perteneciente al ayuntamiento de Madrid.
Desde que somos padres nos encanta ir con nuestras hijas y siempre lo hacemos comenzamos por una visita a la Casa de la Vieja, para nosotros la casa de la princesa, que se encuentra a la izquierda nada más atravesar la entrada principal. Por cierto, como en este parque nada tiene desperdicio, la plaza anterior a dicha entrada es una antigua Plaza de Toros.
Después nos gusta pegarnos una carrera por su enorme paseo principal, el Paseo de los Duelistas.
Visitar esta preciosa fuente.
Hacer una parada frente al laberinto.
Desde el laberinto continuamos nuestro recorrido cruzando un arroyo por un puente que nos lleva a la plaza de los Emperadores y de ahí al Palacio de los Condes de Osuna donde pasamos un rato descansando en sus escaleras.
Desde ahí visitamos el Templete de Baco, no sin antes hacer una parada frente a la entrada al búnker construido durante la Guerra Civil.
A continuación nos adentramos en la zona de más vegetación donde encontramos zonas verdes rodeadas de árboles que transportan a las novelas de Jane Austen. Eso sí, aunque den ganas de organizar el picnic del año, recordad que en este parque tan bien conservado ¡no se puede entrar con comida!
Desde ahí nos acercamos al pequeño lago y al embarcadero llamado Casa las Cañas y para finalizar continuamos por un camino rodeado de árboles hasta llegar de nuevo a la Casa de la Vieja.
Pues este es el recorrido que solemos realizar y aunque el parque tiene muchos más rincones por descubrir e historia de la que aprender, espero que os haya servido como pequeña guía para ir con vuestros hijos.
Por cierto, el Capricho no os defraudará nunca, pero el otoño siempre es especial ¡aprovecha!