Fue un flechazo. Me enamoré de su trabajo al ver unas fotos. Transmitían emociones. Eran delicadas, maravillosamente estéticas. Supe que quería hacer una sesion de fotos con ella. Mi marido me debía un regalo y lo tuve claro: no quiero ni bolsos ni ropa, quiero una sesión de fotos con los niños. Dicho y hecho.
Patricia Semir es una fotógrafa con clase. De las que desprenden estilazo y transmiten la esencia de la cosas.
Creo que hay cosas que no tienen precio. Que los niños crecen demasiado deprisa. Y que algún día echaré mucho de menos estas manitas, esos piececillos y estas sonrisas. Me siento muy afortunada de poder disfrutarlas a diario, de no perderme nada de sus vidas, pero aún así… tengo la sensación de que el tiempo pasa muy rápido, vuela… a veces me encantaría congelarlo.
Cada una de estas fotos tiene un poco de eso. Conserva el sabor de este momento de nuestras vidas, la inocencia de mis hijos con sus 4 y 3 años, sus gestos, sus risas, sus juegos con papa y mama…
Sus miradas y expresiones me las guardo para mi. No quiero que sean públicas. Os aseguro que hay fotos maravillosas de mis hijos, de su complicidad y juegos de hermanos… Patricia ha retratado cada gesto con una sensibilidad pasmosa. Lo siento, me guardo lo mejor! Os dejo solo un pequeño aperitivo.
Porque lo que sí me apetecía era compartir la sesión con vosotros y sobre todo la idea: hacer muchas muchas fotos de nuestros hijos porque algún día echaremos de menos justo esto: el momento actual.
Gracias Patricia por hacerme un poquito más feliz.
Son preciosas!! Transmiten emociones, vida, y esos colores me encantan. Me podrías decir donde es el lugar? Es maravilloso para justo una sesión fotográfica. Gracias!!
Hola!
Es dentro de una urbanización privada… el jardín de la zona común. En realidad no es que la urba esa increíble sino que en esa épocas los colores estaban preciosos. En septiembre-octubre en cualquier zona verde que elijas te quedará bonita. Un beso