100 años de magia: Disney on Ice

Este año, por razones que muchos ya conocéis, no pude ir yo. Pero tenía claro que no quería que mis hijos se perdieran la que para mi es una de las citas más bonitas y mágicas del año: Disney On Ice. Así que los abuelos tuvieron la oportunidad de vivir esto con los nietos y volvieron los 4 tan felices que hasta me alegré de que lo hubieran disfrutado juntos. Mi hija no dejó de bailar en todo el espectáculo…

El espectáculo Disney on Ice: 100 años de magia es una apuesta segura. Una cita familiar en la que todos, pequeños y mayores, terminan con una sonrisa. Y no siempre es fácil conseguir eso…

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La de este año ha sido según todo el mundo la producción más espectacular con 65 personajes en escena y muchos efectos especiales. Dieciocho historias entrañables en un mismo show.

El espectáculo al que fuimos ayer era a las 19.30 de la tarde y tenía dudas de que los niños sin echar siesta, aguantasen. Pero fue sentarse, abrir los ojos como platos y desapareció el cansacio de un plumazo. Cantaron y bailaron y no se perdieron ni un segundo del maravilloso patinaje sobre hielo. La música, las canciones y las piruetas sobre la pista son sorprendentes.

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Diversión y aventuras de la mano de Mickey, Minnie, Pinocho, Pepito Grillo, BuzzLightyear y Woody, junto a los personajes de películas como Mulán y El Rey León,Buscando a Nemo, Los Increíbles y muchos más, en un único show.

EFECTOS ESPECIALES. Una de las cosas que más fascinan a los adultos, además de la impresionante puesta en escena, son los sensacionales efectos especiales que llenan de principio a fin el show. Carrozas motorizadas que representan los cinco continentes, una enorme ballena y más de cien elementos escenográficos, son algunos de las piezas con las que se encontrará el público en el primer acto del espectáculo.

En definitiva, un espectáculo inolvidable, una cita que no hay que perderse. Porque hay espectáculos que le llenan a uno de buenas vibraciones y Disney On ice es uno de ellos. Y buenas vibraciones y alegría es justo lo que necesitan mis hijos ahora. Gracias, gracias y gracias por hacerles un poco más felices.

 

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