Embalse el Atazar en Madrid

Ha sido mi primer destino después de tres meses de confinamiento y la decisión no pudo ser mejor. Disfrutar de este paraíso, cargarme de la luz solar junto al agua y hacer un picnic en la orilla me hizo volver a casa sintiendo que la naturaleza con mis hijos me hace feliz. Había oído hablar mucho de este lugar y varias veces he pasado al lado del embalse sin parar. Un compañero mío de trabajo me lo había definido como un «paraíso en Madrid» y lo es.

El embalse de El Atazar es el mayor de la Comunidad de Madrid: con una capacidad de 425,3  hm³.

En este Valle Bajo del Lozoya, el río Lozoya y las numerosas infraestructuras hidráulicas (embalses de Puentes Viejas, El Villar y El Atazar) atesoran las mayores reservas de agua de Madrid, dando lugar a este bello paisaje.

Un lugar perfecto para disfrutar de un día de ocio familiar porque la zona es de fácil acceso en coche y ofrece mucha variedad de actividades al aire libre. La primera es sin duda el senderismo. La zona tiene muchas rutas agradables y fáciles que hacer con los niños.  Entre las de menor dificultad para realizar con niños podemos mencionar la Senda del Riato, Senda de Pisachón y Quemao Viejo, Puente Romano… También se puede practicar cicloturismo, paseo a caballo, paseos en burro, parapente, escalada.

El embalse es muy grande y puedes ir a diferentes puntos para acceder a su orilla. Si miras un mapa verás que su gran extensión hace que sea posible disfrutar de este lugar desde distintas perspectivas. Puedes acceder a él desde Cervera de Buitrago, Robledillo de la Jara…)

Nosotros elegimos aparcar en el Berrueco y acceder al embalse desde un camino que va desde el parking a la orilla.

El lugar nos encantó. Es realmente idílico y aunque había gente había suficiente distancia para dejar metros de distancia entre un grupo y otro. Así que los niños pudieron jugar cómodamente. Eso sí, tener en cuenta que el baño está prohibido.

A pesar de que no puedes bañarte, los deportes naúticos sí están permitidos y son el gran atractivo de esta comarca: las tranquilas aguas del embalse son ideales para los aficionados a la vela, piragüismo, windsurf, paddle surf y por supuesto, la pesca.

Allí trabaja la empresa Meridiano Raid que alquila piraguas, paddle surf y bicis. Nosotros no había reservado así que la próxima vez las cogeremos con antelación.

Para comer hay varios restaurantes en la zona. El más famoso es el Picachuelo, con una calidad estupenda.

Pero también es posible hacer picnic en la orilla si os apetece.