Praga con niños. 2ª parte

Praga es la ciudad perfecta para disfrutar con los niños de unos días juntos. La emoción no decae porque la ciudad ofrece tantos planes bonitos que es imposible perder la ilusión. Cada día tienes nuevos planes sorprendentes y emocionantes. Ya os conté en este post muchos planes imprescindibles y hoy os cuento nuevas ideas para disfrutar de Praga con los niños.

TORRE PETRIN Y LABERINTO DE ESPEJOS. El Monte Petřín es uno de los mejores lugares para admirar Praga y un gran lugar para ir con niños porque está rodeado de jardines donde puede jugar y tiene unas vistas preciosas. Allí tenéis  una torre que guarda mucho parecido con la Torre Eiffel de París.

Os recomiendo subir hasta arriba. Con una altura de 63 metros, la Torre de Petrin se levantó con motivo de la Exposición del año 1891 y ofrece unas vistas maravillosas de toda la ciudad. Las escaleras de caracol se hacen un poco duras con los niños pero el esfuerzo merece la pena.

El laberinto de espejos se encuentra cerca de esta torre mirador. Es un pabellón de madera de finales del siglo XIX con varios espejos. El camino entre ellos conduce a un diorama que representa una escena de batalla de 1648, cuando las tropas suecas intentaron cruzar el Puente de Carlos y después tienes una sala con espejos cóncavos y convexos que deforman y son divertidos.

La entrada está incluida en el precio de la Praga Card. Es una visita corta y se ve todo en menos de una hora  pero mis hijos se rieron mucho haciendo figuras y viéndose deformados. Te asegura un rato divertido y diferente.

FUNICULAR DE PETRIN.  Para subir a la torre lo puedes hacer o bien andando o en Funicular desde la calle Újezd. El funicular está incluido en el bono de transporte del tranvía así que si no dudes en utilizarlo. A los niños les encanta montarse en funicular y admirar las vistas subiendo o bajando por la colina.

DAR DE COMER A LOS CISNES. Uno de los planes gratis más famosos y bonitos de Praga para los niños es disfrutar del espectáculo de los cisnes en el río y darles de comer.  En sus orillas, los cisnes decoran las fantásticas fotos que ofrecen el puente, las torres y campanarios de esta ciudad y sin duda los niños disfrutan mucho de la magia de tener tan cerca a estos animales que forman parte del decorado mágico de la ciudad.

Hay decenas de cisnes y patos y si llevas un poco de pan aparecen todos buscando la comida. Sentarse a orillas del río Moldava y disfrutar de ese rato de paz y tranquilidad, viendo la panorámica de la ciudad rodeados de estos animales fue un momento maravilloso.

TRANVÍA 42.  El tranvía 42 es otro plan especial de la ciudad porque te permite recorrer la ciudad desde un tranvía histórico. Eso sí, tened en cuenta que no circula a diario,  sólo los fines de semana.

El precio es de 35 CZK y se paga al conductor. Los billetes del tranvía normal no sirven para esta línea. El recorrido dura aproximadamente unos 40 minutos y recorre lo más importante del centro histórico por lo que desde este tranvía puedes hacerte una idea de todo lo que tienes que ver y conocer en Praga. Es un plan cómodo con los niños para conocer la ciudad.

BARRIO JUDÍO. Otra de las visitas que no puedes perderte en Praga es recorrer  su antiguo Barrio Judío: Josefov. Se trata de un área bastante pequeña, pero tiene mucho interés histórico porque incluye seis sinagogas y otros puntos de interés como el Viejo Cementerio Judío. El Viejo Cementerio Judío es bastante impactante.  Fue fundado a principios del s.XV (la lápida más antigua data de 1439) y estuvo en uso hasta 1787. Se estima que hay unas 12.000 lápidas visibles.

Fuera del Barrio Judío os recomiendo ver la Sinagoga de Jerusalén. Se trata de la sinagoga más grande de Praga y también la más moderna (1906). Fue diseñada en estilo pseudo-morisco e impresiona tanto en el exterior como en el interior por sus vivos colores y la recargada decoración. A nosotros nos encantó.

HAMLEYS. Esta juguetería es el sueño de cualquier niño.  Exhibiciones de juguetes, trucos de magia, aviones que vuelan, un tiovivo y hasta un tobogán gigante. Lo mejor de Hamleys es que al contrario de otras jugueterías aquí animan a los niños a tocar y probar todos los juguetes.

Es un paraíso de color y diversión donde los niños se sienten protagonistas. Las horas vuelan dentro porque los pequeños van de un lugar a otro participando: coches teledirigidos, juegos de agua… el tiovivo es de pago pero el tobogán con forma de serpiente es gratuito y lo pueden utilizar para ir de un planta a otra. Sin duda es un lugar mágico que te lleva a la niñez.

El único «pero» de esta juguetería es que es difícil sacar a los niños de allí y normalmente siempre pican y quieren comprar algo. Así que la visita puede salir cara ja,ja.

ASCENSOR QUE NO PARA.  Lo que nos reímos en este ascensor. A los niños les divirtió muchísimo conocerlo y subirse. En Praga son famosos y comunes pero para nosotros es algo completamente insólito. Se llaman Paternoster y es un ascensor que no tiene puertas ni botones y te tienes que subir en marcha. En la ciudad son relativamente comunes y se pueden encontrar en algunos edificios de entrada gratuita. Nosotros fuimos al del Palacio YMCA.

TEATRO NACIONAL. La música forma parte del alma de Praga. Praga es música. Por eso creo que es importante que en cualquier viaje a Praga se viva una experiencia musical. Los ciudadanos de Praga llevan la música en la sangre, la música es para ellos es una tradición familiar. Desde el siglo XVIII, esta ciudad, ha tenido gran influencia en la música a nivel mundial, Praga fue la primera ciudad en acoger a compositores como Mozart, que aquí compuso su ópera Don Giovanni y la estrenó en el Teatro Estatal.

Nosotros tuvimos la oportunidad de disfrutar del Concierto de Adviento en el Teatro Nacional y fue una experiencia que no olvidaré nunca. No sólo por el concierto en sí, que me emocionó hasta las lágrimas, sino por la oportunidad de poder ver el Teatro Nacional por dentro. Un impresionante edificio que, desgraciadamente, sufrió un gran incendio en 1881. Era tal el amor que los checos le tenían a este teatro, que los propios habitantes pagaron la remodelación para que brillara con más fuerza todavía.

Muy recomendable es ir a la  Ópera de Praga, pero también  podéis disfrutar de los pequeños conciertos que organizan en esta época muchas iglesias. La opción low cost es disfrutar, sin más, de todos los músicos y artistas que ofrecen espectáculos callejeros en las principales plazas de Praga.

RESTAURANTES. Comer bien en Praga no es difícil. Nosotros hemos disfrutado mucho de las comidas y cenas allí porque los restaurantes tienen muchas opciones muy interesantes para los niños. Sin duda la estrella de nuestro viaje fue el restaurante con vías de tren en el que la comida te llegaba en tren, Vytopna Railway Restaurant.

PIZZA NUEVA. En los viajes solemos alternar restaurantes que nos gustan a nosotros con otros más para los niños, y una pizza rica es siempre un gran plan para ellos. Os recomiendo esta pizzería muy céntrica con pizzas al horno de leña y precios muy razonables. El único «pero» es que el servicio fue muy lento.

FOOD LAB. Este restaurante fue una grata sorpresa. Su decoración es exquisita, un local moderno en el que se cuidan todos los detalles. La calidad de la comida es excelente porque reinterpreta los platos tradicionales dándoles un toque moderno y sus sabores son una sorpresa. Las cantidades no son enormes pero la decoración y la exquisitez de sus platos lo compensa. Muy recomendable.

VÝTOPNA. El restaurante preferido de mis hijos fue este, sin ninguna duda. ¿Os imagináis comer dentro de una estación ferroviaria gigante en la que los trenes te traen la comida? Dejamos este lugar como sorpresa final para la última cena del viaje y fue un acierto. Los niños estuvieron toda la cena emocionados viendo a los trenes ir y venir con comida y bebidas. Nos gustaron especialmente las hamburguesas.

MINCOVNA. La ubicación, calidad de la comida y precio de este restaurante es un 10. En mi opinión es uno de los mejores de Praga relación calidad/precio. Probamos el menú del día. No es un menú cerrado, sino que cada día tienen unos platos mucho más baratos de su precio normal y todos nos parecieron exquisitos.

Además el restaurantes está ubicado junto a la Plaza Vieja por lo que su ubicación céntrica es fantástica si estás en el  centro histórico haciendo visitas.

Y para hacer un descanso a media mañana o media tarde os recomiendo esta pequeña cafetería (debajo del funicular) llamada U Knoflíčk que tiene unas tartas caseras espectaculares.

Praga es un destino perfecto para disfrutar unos días con los niños en cualquier época del año. La ciudad está llena de planes divertidos y perfectos para disfrutar toda la familia.

Deja un comentario