The Residence. Maldivas con niños

Maldivas con niños. Maldivas no es quizá el primer destino en el que piensas cuando buscas viajar con niños. Las islas son un paraíso en la tierra. Pero lejano y caro. Así que tradicionalmente este destino se destinó a viajes de luna de miel y caprichos para afortunados con buenas cuentas de ingresos. Pero compartir el paraíso con los niños es una experiencia inolvidable. Maldivas es un destino diez para viajar en familia y razones no le faltan para convertirse en el viaje que tus hijos no olvidarán en su vida.

Cuando el Hotel The Residence me ofreció conocerlo, mi primer pensamiento fue viajar sólo con mi marido y disfrutar de unos días de segunda luna de miel.  Pero finalmente decidimos ir todos y no imagináis cuánto me alegro de la decisión. El paraíso hay que compartirlo. Cuando pones un pie en las islas y miras alrededor eres consciente de no hay ningún lugar en el mundo comparable a este. La realidad supera tus expectativas. Conocer Maldivas es enamorarse de Maldivas. Mis hijos han vuelto fascinados y los tres coinciden en que ha sido un viaje único.

La sensación de libertad y desconexión que ofrece vivir en tu propia isla privada es liberadora.  En Maldivas se vive descalzo porque muchos de los suelos son de arena. No hay reloj. No hay ruido ni tráfico ni estrés. Aquí el mejor plan es no hacer nada. Porque en Maldivas eso es justo tenerlo todo. Mar, arena, inmersiones, naturaleza, animales, silencio, atardecer. Y al día siguiente empieza de nuevo el ciclo: mar, arena, inmersiones, naturaleza…

¿POR QUÉ VIAJAR A MALDIVAS CON NIÑOS? Te podría dar decenas de razones por las que este viaje no puede compararse a ningún otro. Por ejemplo, dormir en una over water con el mar turquesa enfrente y levantarse cada mañana con las olas en tu puerta es algo que mis hijos no olvidarán en la vida.

Es un destino covid free, algo fundamental este año y  sobre todo y muy importante, el tema  precio. Ahora es el momento. Los precios de los hoteles han bajado mucho por el covid y es un «ahora o nunca» porque quizá en un año vuelvan a subir y viajar en familia será imposible.

EL HOTEL: THE RESIDENCE 

El nombre del hotel es una declaración de intenciones. No quiero ser un hotel, sino una «residencia» donde te sientas en casa. El hotel se divide en dos islas, Dhigurah (con 173 villas ideales para familias)  y Falhumaafushi  (94 villas pensadas para parejas), comunicadas por un puente de madera idílico, con el mar turquesa a ambos lados. Recuerdo lo que nos gustaba cruzar el puente en bici y la sensación de felicidad que yo sentía al mirar alrededor y pensar: «estoy aquí, el paraíso existe».

Todas las habitaciones se hallan frente al mar y están en completa armonía con la naturaleza. Además el hotel tiene una de las mejores zonas de las islas para hacer snorkel por lo que sumergirse en sus cálidas aguas transparentes en busca de peces, tiburones y tortugas es el mejor plan del día. Las zonas comunes del hotel son tan paradisíacas como el entorno: sus beach club con piscinas infinitis, su kids club rodeado de palmeras y sus restaurantes al borde de la playa.

La desconexión es inevitable.  No hay prisa ni nada que hacer más allá de exprimir cada hora del día disfrutando con tus hijos.

MOVERSE EN BICI.

Una de las cosas que más me gustó del hotel The Residence es que para moverte de un lado a otro del hotel te dan unas bicicletas que te esperan en la habitación. Para los niños ya sólo eso era un plan. Coger las bicis y cruzar la isla llena de palmeras hasta la playa, o hasta el restaurante para ir a comer o desayunar era un momento muy divertido.

TODO INCLUIDO

El hotel The Residences ofrece alojamiento con Todo incluido por lo que una vez allí te olvidas del dinero. Comida y bebidas están incluidas todos los días de tu estancia. Tiene diferentes restaurantes, todos los vistas privilegiadas, y la variedad del buffet es extensa. Todo tipo de comidas, barbacoa, carnes y pescados a la brasa, variedad de ensaladas y muchos postres. No olvidaré mientras viva esos desayunos junto a la arena blanca de la playa, comiendo fruta fresca y viendo el mar. El mar es un compañero presente cada hora de este viaje.

 

HACER SNORKEL

Sin duda una de las actividades estrella del hotel es la posibilidad de disfrutar de fondos marinos extraordinarios. Maldivas es probablemente uno de los mejores lugares del mundo para hacer snorkel. La gran riqueza submarina y sus aguas tranquilas y transparentes hacen que sea muy fácil acceder al mundo submarino.  En el Hotel The Residence te dejan de forma gratuita un equipo de snorkel por huésped.

Nosotros hacíamos snorkel cada día y los niños disfrutaban infinito. Nos íbamos encontrando peces, decenas, y muchos tiburones. No vimos tortugas ni mantas, a pesar de que en el hotel era fácil encontrarlas. Y recuerda: se mira pero no se toca. Disfruta de lo que ves, haz fotos, pero no molestes.

Un consejo: Al practicar snorkel no se pasa calor, por lo que es muy común no darnos cuenta de que nos estamos quemando hasta que es demasiado tarde. Para evitar pasar las vacaciones con la piel dolorida, lo mejor es utilizar crema de alta protección solar resistente al agua.

DESTINO COVID FREE.

Maldivas siempre ha sido un destino de moda pero este año lo está más que nunca y es porque es uno de los pocos destinos covid free del mundo gracias a la vacunación de un alto porcentaje de su población y de prácticamente la totalidad de los profesionales del sector turístico. Sus estrictas medidas de seguridad (todo el que viaja a las islas debe tener pcr negativo), el distanciamiento natural de las islas  y el contacto mínimo con la gente lo convierten en un lugar más seguro que cualquier otro.

DORMIR EN OVER WATER

El mar, aquí, te da los buenos días. Despertarse cada mañana con ese agua turquesa frente a ti es algo inolvidable. Nosotros nos alojamos en una villa over water con piscina, algo que sólo en pocos lugares del mundo.

Todo es tan de postal que parece mentira. Íbamos andando en bici y los niños se paraban para coger cocos, para ver murciélagos… los baños en las piscinas del beach club del hotel tomando unas piñas coladas.

El hotel tiene kids club con un montón de actividades pero como nosotros estuvimos poco tiempo y mis hijos estaban felices disfrutando del snorkel no quisieron ir.

QUÉ SE NECESITA PARA VIAJAR A MALDIVAS. 

Actualmente todos los viajeros (mayores de un año) con visado de corta duración deben presentar un certificado PCR con resultado negativo para viajar a Maldivas. Para estancias inferiores a 30 días no se necesita solicitar visado. A la llegada al destino se expide un visado de turista de forma gratuita. Eso sí, conviene tener el pasaporte en vigor y con más de seis meses de validez. Y en lo que se refiere a vacunas, no hay ninguna obligatoria.

QUÉ NO DEBE FALTAR EN TU MALETA.

Piensa que vas a vivir en una isla así que en este viaje más que nunca hay que preparar bien la maleta y no dejarse nada. Imprescindibles protector solar (allí el sol abrasa), trajes de baño, cámara o funda acuática, medicamentos y ropa muy ligera para el calor. No hace falta que lleves equipo de snorkel, te lo dan gratuitamente en el hotel.

VUELO DIRECTO. Actualmente Iberia tiene un vuelo directo desde Madrid de 11 horas y normalmente es un vuelo nocturno. Me parece perfecto porque vas más de la mitad del vuelo dormido y al despertar estás en el paraíso.

COMO LLEGAR A LAS ISLAS. Una vez aterrizados en Male, lo normal es llegar al hotel o en lancha rápida o en hidroavión. Para acceder al hotel The Residence hay que coger un vuelo interno por lo que es importante cuadrar bien los horarios de este vuelo interno.

Más información y precios: www.cenizaro.com