Ruta de los cuentos en Alemania

Érase una vez…. así comienzan los cuentos que todos hemos oído en nuestra infancia. Esos que nos hacían soñar con mundos mágicos, personajes buenos que ganaban a los malos, castillos y jardines increíbles.  Todo eso se hace real cuando visitas la ruta de los cuentos  de Hadas de Alemania. Niños y padres se convierten en protagonistas de una aventura que les  devuelve a la infancia. Seguir las huellas de los hermanos Grimm en Alemania es como formar parte de algo que ya conoces y que transmite la nostalgia de una época de tu vida.

Los bosques, castillos y pueblos de la región de Hesse, situada en el corazón de Alemania, inspiraron a los famosos hermanos Grimm mientras recopilaban inolvidables cuentos infantiles como Blancanieves, Cenicienta, la Bella Durmiente o El gato con botas. La «Deutsches Märchenstrasse» (éste es su nombre en alemán) es una ruta de más de 600 km que recorre los pueblos y ciudades relacionados con los Hermanos Grimm y sus obras. El pueblo de Pulgarcito, el de Caperucita Roja,  la casa museo de Blancanieves y muchos otros lugares mágicos.

Alemania es un país muy completo en el que es fácil viajar, que apuesta por otro tipo de turismo. Naturaleza, sostenibilidad, respeto a las tradiciones, cultura. Un lugar que me hace conectar con la cultura, la naturaleza,  con lo que importa. Es fácil organizar la ruta así que os dejo lo que vimos en 4 días y os animo a ir más días porque nos quedaron muchas cosas por ver y hacer. Me habría encantado visitar Bremen o Hamelín.

PRIMER DÍA: MARBURGO 

Comenzamos nuestra ruta en Frankfurt, la ciudad a la que volamos desde Madrid. Ese fue nuestro punto de partida para poder llegar en tren a Marburgo.  El trayecto en tren dura 52 minutos y ya estás allí.  Los trenes alemanes son una forma de transporte rápida, cómoda y económica. Marburgo es  una de las ciudades más bonita que he visitado, literalmente una ciudad de cuento de hadas. Las casas que uno imagina cuando soñaba de pequeño están allí.

Sin duda uno de los edificios que hay que ver porque que dejan sin habla es el Ayuntamiento. Un antiguo edificio construido en el siglo XVI, ubicado en el corazón del Casco Antiguo de la ciudad de Marburgo. Destaca por su estilo gótico y por su antiguo reloj y es precioso.

Al llegar a la ciudad podéis o bien descargaros la app o bien ir a la Oficina de Turismo y pedir que os den el Grimm Dich, que es la ruta de los cuentos por la ciudad. Es un juego de pistas muy divertido para los niños. Tenéis que encontrar 15 objetos referentes a los cuentos por la calles de Marburgo. El folleto sólo está en alemán, así que tenéis que tener paciencia e ir mirando el mapa con detalle por las calles para ir encontrando las figuras. Entre ellos está la cesta de Caperucita Roja, el espejo de Blancanieves, el lobo y los 7 cabritillos o la casa de chocolate de Hansel y Gretel.

Sin duda uno de los lugares más mágicos de la ciudad es el Castillo. Para llegar a él hay que subir bastantes escaleras pero el recorrido tiene encanto y sin duda es un trayecto que se disfruta, aunque sea cuesta arriba. Otra opción es subir en autobús. Mi punto de fotos preferido son las escaleras de acceso donde se ve el zapato rojo. En la escalera se lee un texto con palabras de los hermanos Grimm.

 

TERCER Y CUARTO DÍA: KASSEL. 

Kassel es considerada, por muchos, la capital de este viaje especial. Uno de sus grandes atractivos es el Museo de los Hermanos Grimm que se situa en el Palacio Bellevue. No podéis perderos esta visita porque el museo te hace entender la historia de los Hermanos Grimm y el proceso de recolección de los famosos cuentos. En esta ciudad los escritores pasaron más de 30 años y escribieron más de 200 obras. El museo tiene exposiciones, documentos originales y obras de artistas en una superficie de 1.600 metros cuadrados y muestra la polifacética obra de estos investigadores del idioma y entusiastas recopiladores de cuentos. Es divertido y muy interesante.

La visita al centro sumerge en su mundo de fantasía maravilloso.  También se explica cómo fueron recopiladas sus historias y revela los bosques, castillos y pueblos que les inspiraron. Tiene información muy interesante que te ayuda a conocer el extraordinario trabajo que hicieron. Además tiene experiencias inmersivas. A mis hijos les encantó.

Ese día por la tarde vivimos el que sin duda fue otro de los grandes planes de este viaje. En Kassel debes visitar los Juegos de Agua del parque Wilhelmshöhe. Los juegos del Agua y el Castillo de Löwenburg  son tan espectacuales que creo que merecen un post propio así que allí daré todos los detalles (cómo llegar, cómo verlos).

Los juegos del agua son muy famosos en Kassel y tienen lugar los miércoles y domingos a las 14.30h, y en el verano (de junio a septiembre) también podemos disfrutarlos todos los primeros sábados del mes en el espectáculo del agua nocturno. Ampliaré información en el próximo post.

Lo primero que llama la atención al aproximarse  es la imponente estatua de Hércules (71 m) que preside la colina del parque Wilhelmshöhe, en el oeste de la ciudad. Desde su cima, además de las vistas, se ve caer una cascada escalonada que acaba en los lagos del palacio neoclásico construido en el siglo XVIII, en tiempos del príncipe Wilhelm IX.

Los juegos del agua son un conjunto de cascadas y fuentes que desde hace más de 300 años impresionan a los visitantes del parque por su espectacularidad. Las cascadas se van llenando a medida que el agua baja por la colina y vivirlo allí es increíble. Después os recomiendo visitar el Castillo de Löwenburg  , que está también allí y parece sacado de una película de Harry Potter.

¿Qué más cosas podéis visitar en Kassel? Si tenéis ganas de ver naturaleza y caminar, os recomiendo que vayáis al parque Staatspark Karlsaue para disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. Es el segundo parque más grande de la ciudad y tiene una zona muy bonita llamada la Isla de las Flores Siebenbergen que es una perla muy especial del arte de los jardines. Tiene flores preciosas y animales como pavos reales. Aquí también se encuentra el restaurante Cafe Siebenbergen Siebenbergen, con vistas maravillosas.

 

DÓNDE ALOJARSE. En Alemania puedes encontrar distintos alojamientos que se adaptan a todo tipo de bolsillos y presupuestos. En nuestras 4 noches en el país nos alojamos en tres tipos de hoteles, todos muy distintos. En Frankfrut elegimos un hotel de ciudad que de verdad os recomiendo: céntrico, con diseño, familiar y super cómodo (además de económico) que se llama Moxy Frankfurt City Center.  

En Marburgo vivimos el sueño de alojarnos en una habitación familiar de la maravillosa cadena Vila Vita.  Es una cadena de hoteles de lujo con una atención maravillosa para familias. Además el hotel tenía piscina y zona de sauna y volver de las visitas y estar un rato en esa zona fue un premio para los niños. Yo conocía la cadena porque estuve en el hotel que tienen en Algarve (un sueño de sitio) y el de Marburgo es así de maravilloso.

En Kassel quisimos vivir la experiencia de alojarnos en una caravana junto al río en el Camping de la ciudad para estar rodeados de naturaleza. Una experiencia diferente y divertida. El camping tiene una tienda con mermeladas y pan delicioso donde comprábamos el desayuno cada mañana y despertarse con esas vistas era una maravilla.

Dicen que leyendo se aprende mucho pero como más se aprende es viviendo. Y espero que mis hijos no olviden nunca todo lo que han vivido estos días en los escenarios de algunos de los cuentos más conocidos del mundo. Hay destinos que ponen fáciles las cosas y Alemania es uno de ellos.

Toda la información sobre este destino: https://www.germany.travel/en/home.html